Nuestra historia de amor con Eslovenia fue de tan solo 9 días. Y si tuviéramos que describir este país con un solo adjetivo, ¡sería verde! 

Ya nos habían advertido de que Eslovenia enamora, y es que un país en el que puedes hacer uno de los mejores senderismos de Europa, practicar espeleología, hacer rutas en bicicleta, remar en kayak por sus lagos y gargantas, bañarte en cascadas o disfrutar de su costa haciendo buen snorkel, no puede dejar indiferente a nadie.

La pequeña Eslovenia (su territorio es inferior a Galicia) no es tan conocida como su vecina Croacia, así que si tienes pensado visitar la perla desconocida del corazón de Europa, ahora es el momento.

Nuestra recomendación es viajar en coche o, de hacerlo en avión como hicimos nosotros, alquilar un coche que te permita moverte con toda libertad. Si quieres saber con qué compañía decidimos alquilar y qué fue lo que nos decidió a elegirla échale un vistazo a la entrada de Alquiler de coche en Eslovenia. Así podrás comparar precios, hacerte una idea de lo que gastamos en gasolina frente a los kilómetros que hicimos, lo que nos costaron los parkings y alguna que otra cosilla más.

A la hora de decidir nuestro itinerario, de nuevo fuimos a empaparnos de la información que siempre recogemos de diferentes blogs de viajes. Teníamos claro que queríamos exprimir al máximo los 9 días de que disponíamos, y que intentaríamos combinar montaña, ciudad y costa. 

Una vez claro nuestro itinerario, lo siguiente fue decidir dónde dormiríamos. En un principio barajamos la posibilidad de establecer nuestro campamento base en Ljubljana, la capital de Eslovenia. Se nos ocurrió que quizá establecernos en casi el centro del país e ir moviéndonos desde aquí a los diferentes lugares no sería mala idea, hay que tener en cuenta que llegas a casi cualquier lado en máximo algo más de dos horas desde aquí.

Pero finalmente nos decidimos por alojarnos en tres lugares diferentes del país, y menos mal, ya que, si bien Ljubljana está en el centro de todo, salir y entrar de la ciudad requiere su tiempo, y estar a unas 2 horas del lugar que has decidido visitar ese día, te supone madrugones todos los días. Así que, si alguien se lo está planteando, que lo deseche. Moverse un par de veces con las maletas a cuestas en busca de tu nuevo hotel no es tan dramático.

Una vez este apartado también claro, ideamos en nuestra mente cual sería el itinerario (siempre abierto a posibles cambios si el clima no acompañaba, ya que viajamos a finales de septiembre de 2018) y éste quedó así (a falta de ampliar con Post cada día): 

DÍA 1: España – Venecia – Lago Predil – Kranjska Gora

Llegada a Venecia en avión. Aterrizamos exactamente en el aeropuerto de Marco Polo sobre las 11:30h de la mañana y en menos de una hora ya teníamos preparado nuestro coche de alquiler, el cual cogimos en el mismo aeropuerto. Puesto que nuestra intención era llegar hasta la zona de Kranjska Gora, entramos al país por el norte, haciendo antes una parada en el bonito Lago Predil (aún en Italia)

Nos alojamos en el Hotel Veranda Gostilna por 297€ + 10€ de tasas por 4 noches con desayuno y parking incluido. 

Échale un ojo al post  de «Primer día en Eslovenia» donde hemos ampliado esta información.

 

DÍA 2: Cascada Pericnik – Vintgar Gorge – Lago Bled – The Chruch of St. Primoz

Bien temprano visita de la cascada Pericnik, con un recorrido fácil el cual completas en menos de una hora.

Tras la cascada pusimos rumbo hacia Vintgar Gorge, donde hicimos la ruta que discurre por la famosa garganta. Es un recorrido fácil de algo más de kilómetro y medio. Es recomendable hacerla temprano por la mañana, ya que hacia el mediodía la afluencia de turistas en mayor.

Más tarde nos dirigimos hacia el Lago Bled, donde pudimos hacer fotos y admirar la grandiosidad del lago desde uno de sus miradores más famosos, el Mirador de Ojstrica.

Nuestra intención era ver el atardecer desde el Castillo de Bled, pero aún nos quedaban unas horas, así que decidimos acercarnos a una de las iglesias más instagrameables de Eslovenia, The Church of St. Primoz.

Una vez hechas las fotos de rigor y haber alucinado con el paisaje, llegamos al Castillo de Bled donde vimos el atardecer desde una de sus terrazas.

Échale un ojo al post  de «Segundo día en Eslovenia» donde hemos ampliado esta información.

DÍA 3: Cascada Savica – Teleférico de Vogel – Mostnica Gorge

Nuestra primera parada fue la Cascada Savica, una cascada de fácil acceso separada del parking por 560 escalones de subida.

Tras la visita a la cascada tocaba coger el Teleférico de Vogel, las cabinas salen cada 30 minutos y te dejan en una estación de eskí que en verano está cerrada, en la que puedes disfrutar de sus maravillosas vistas al Lago Vogel y tomar algo en la terraza de su cafetería.

Más tarde nos dirigimos hasta la Mostnica Gorge, unas gargantas mucho menos famosas que las de Vintgar pero que bien merecen una visita. Tienes la opción de hacer recorrido corto o largo, nosotros nos vinimos arriba y finalmente acabamos haciendo el largo, llegando hasta la Casacada Mostnica al final del valle. Aunque una vez hecho, creemos que, con el recorrido corto, ves el tramo más bonito de la ruta, y por tanto puedes prescindir de llegar hasta la cascada, que no deja de ser una cascada con poca agua y poco llamativa, al menos cuando nosotros fuimos.

Échale un ojo al post  de «Tercer día en Eslovenia» donde hemos ampliado esta información.

DÍA 4:  Jasna Lake – Paso de Vrsic – Gargantas del Río Soca – Cerkev Sv. Tomaz

Iniciamos el día visitando el Jasna Lake, para nada comparable con sus dos lagos famosos, El Lago Bled y el Lago Bohinj, pero como nos pillaba de paso no estaba de más hacer un alto para verlo.

Una vez visto el lago le tocaba el turno a la carretera de montaña más alta de Eslovenia, el Paso de Vrsic. Se trata de una carretera escénica que une Kranjska Gora con Bovec, por la que discurriendo por sus famosas 50 curvas vas encontrando tesoros de la historia de Eslovenia.

Hicimos varias paradas por el camino, una de ellas en las Gargantas del Río Soca. Nuestra intención era llegar hasta Lepena, justo donde el río Soca y el río Lepena se unen, pero la carretera estaba cortada por una maratón, así que decidimos deshacer el camino hecho y dirigirnos a nuestra siguiente parada.

Llegamos hasta la localidad de Sveti Tomaz, donde descubrimos otra iglesia de cuento, la Cerkev Sv. Tomaz, allí terminamos el día viendo atardecer.

Échale un ojo al post  de «Cuarto día en Eslovenia» donde hemos ampliado esta información.

DÍA 5: Lago Bohinj – Llegada a Ljubljana

Tocaba poner rumbo hacia la capital, Ljubljana, pero antes haríamos un alto en el camino.

Nuestra parada fue en el Lago Bohinj, donde decidimos aprovechar el solazo que el día nos había regalado alquilando una canoa para recorrer el lago. He de decir, que es una actividad super recomendable, estuvimos 4 horas remando y parando en las orillas del lago que más nos gustaron, tomamos el sol y nos bañamos, una gozada de día.

Al atardecer llegamos hasta nuestro nuevo hotel, ya en Ljubljana nos alojamos en el Hotel Janez Rooms por 168€ + 10€ de tasas por 2 noches con desayuno, parking y uso de bicicletas incluido. 

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DÍA 6: Ljubljana

Día completo visitando la ciudad de Ljubljana. Lo hicimos en bicicleta (unos 12Km) y a pie (unos 4Km) Finalizando el recorrido viendo el atardecer en la Torre del Homenaje del Castillo de Ljubljana.

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DÍA 7: Castillo de Postojnska – Cuevas de Skocjanske – Piran

Dejamos la capital para llegar hasta la costa, exactamente a la localidad de Piran.

De camino paramos a conocer el Castillo de Postojnska. No llegamos a visitarlo por dentro, pero solo con admirarlo desde fuera ya es un regalo para los ojos.

Nuestra siguiente parada serían las Cuevas de Skocjanske, donde visitamos el interior de estas grandiosas cuevas haciendo dos recorridos que nos llevaron unas 3 horas, andando tranquilos y parando a hacer fotos.

Finalmente llegamos a la bonita localidad costera de Piran por la tarde, donde nos alojamos en el Hotel Second Life por 180€ + 5€ de tasas por 2 noches con desayuno incluido. El parking que se nos ofreció se encontraba en las inmediaciones y nos hicieron un descuento por estados alojados en nuestro hotel (18€ por dejar el coche allí los 2 días)

Finalizamos el día recorriendo la localidad de Piran, donde vimos atardecer con unas bonitas vistas de la ciudad desde su muralla.

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DÍA 8: Playa de Moon Bay – Rovinj

Teníamos ganas de playa, así que pasamos la mañana en la playa de Moon Bay, a menos de 10Km de Piran. Se trata de una playa de no muy fácil acceso, ya que has de descender hasta ella por unos escalones que bordean el acantilado, pero una vez abajo, te encuentras con una bonita playa de canto rodado en la que puedes practicar nudismo si lo prefieres.

Tras pasar la mañana y comer allí, pusimos rumbo a la preciosa Rovinj. Para ello tuvimos que pasar la frontera, ya que Rovinj no está en Eslovenia, sino en la vecina Croacia. Allí pasamos la tarde callejeando por sus empedradas calles, vimos el atardecer en su puerto y cenamos, para después volver de nuevo hasta nuestro hotel en Piran.

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DÍA9:  Trieste – Castillo de Miramare – Venecia – España

Tocaba volver a España, nuestro vuelo salía tarde, así que teníamos toda la mañana y medio día para aprovechar.

Pusimos rumbo a Italia, y decidimos parar a conocer la localidad de Trieste. No le dedicamos más que parte de la mañana, ya que teníamos en mente otro alto en el camino, el Castillo de Miramare.

La visita al castillo nos gustó más que la ciudad de Trieste, y visitando sus jardines y su interior se nos fue casi todo el tiempo que teníamos.

Finalmente llegamos al aeropuerto de Marco Polo por la tarde donde dejamos el coche de alquiler, y no nos quedó otra que volver a casa.

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Como veis Eslovenia tiene de todo: de las imponentes cumbres de los Alpes Julianos a la magia subterránea de las cuevas de Postojna y Škocjan, pasando por lagos y ríos esmeralda y un tramo breve pero hermoso de costa adriática. Su increíble mezcla de climas lleva las brisas cálidas del Mediterráneo hasta las faldas de los Alpes, donde puede nevar incluso en verano. Con más de la mitad de su territorio cubierta de bosques, Eslovenia es uno de los países más verdes del mundo. ¿Te lo vas a perder?

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